jueves, 30 de marzo de 2017

Perspectiva unificada XV

Todo lo que tiene principio tiene final. Y lo que comenzó aq llega a su remate y termina definitivamente.

Siquiera por un instante me gustaría hacer salir del papel o de la pantalla estas figuras. El modo de lograrlo (o de intentarlo al menos) se explicaba en la anterior y penúltima entrega. 

Sirva esta ilustración de homenaje a Escher, que crea la ilusión sin más técnica que su genio y su maestría.


Variaciones sobre el tetraedro y el cubo:


El cubo y algunos descendientes suyos:



Y nada más, amigos. Muchas gracias por habernos acompañado.

Manipula, que mucho queda

Todas estas estrategias se ejercen con total descaro e impunidad, a bombo y platillo, dado el dominio casi absoluto de los medios. Por eso no podemos dejar de denunciarlas, de difundir artículos como este, anticuerpos contra su omnímoda presencia. No se puede bajar la guardia, porque en cuanto te descuidas te meten un gol como una casa.


Rebelión

Hace unos años publique en el desaparecido Diario Progresista un artículo bajo el título El PP y las «estrategias de la manipulación». Transcurrido el tiempo y después de que el Partido Popular sigue en el Gobierno con el apoyo del PSOE y Ciudadanos, han perfeccionado el sistema y ahora la manipulación es casi perfecta. Quitando alguna coma y poniendo algún que otro punto, la reflexión de entonces sigue teniendo vigencia.

Los «ilusionistas» llamamos «Misdirection» a distraer la atención de los espectadores hacia algún punto distinto de donde se realiza el movimiento secreto o «gimmick». Los objetivos son bien distintos; nosotros para hacer aparecer una paloma, ellos para que desaparezcan derechos, pensiones y prestaciones.

En el libro «Armas silenciosas para guerras tranquilas», atribuido a Noam Chomsky, hace referencia a determinadas estrategias de manipulación a través de los medios de comunicación. Otras fuentes afirman que las «10 Estrategias de Manipulación» es un documento del Grupo Bildergerg (mayo de 1979). Sea como sea, estas son las mencionadas estrategias y cómo el PP las aplica a su favor.

Estrategia de distracción; para mantener a la gente ignorante. Con el fin de evitar que la ciudadanía piense y se organice, se lanza una lluvia de información poco importante o fuera de su alcance, manteniendo la atención lejos de los problemas reales.

Los debates que se han producido en Podemos, la batalla interna en el PSOE por el poder, el soberanismo en Catalunya y las sentencias hechas públicas casi al unísono del caso Urdangarín o Tarjetas black de Rato, siendo importantes son humo. Nos enzarzamos en guerras de opinión sobre si España es una nación de naciones o como se trata el riesgo de fuga en el Código Penal, como si fuéramos expertos historiadores o juristas prestigiosos. Mientras, el poder protege a los corruptos y perdemos de vista los recortes en sanidad, educación y la pérdida del poder adquisitivo de las pensiones.

Estrategia de ejecución gradual; para evitar el conflicto social inmediato. Para llevar a cabo una medida, que en principio podría resultar inaceptable socialmente, basta con aplicarla de forma gradual; creando el ambiente propicio para que lo inaceptable se convierta en inapelable. En los últimos tiempos, se han venido introduciendo ideas y conceptos, para reducir la organización del Estado (menos gasto social y menos servicios públicos). Hoy se ven sus frutos envenenados.

Ahora Las Marchas de la Dignidad en defensa del Sistema Público de Pensiones, salen a «las calles a cuerpo, para mostrar una realidad que se quiere ocultar y para demostrar la solidaridad con quienes sufrimos los efectos de las políticas capitalistas que, utilizando la crisis como excusa, confiscan derechos y riqueza a las clases populares y trabajadoras en beneficio de una minoría privilegiada.» Ocupan las calles para defender los servicios públicos como la sanidad, la enseñanza y denunciar la situación de pobreza de más del 30% de la población y el aumento de la pobreza infantil.

Estrategia de diferir resultados; suponiendo que es más fácil aceptar un sacrificio en el futuro, que una inmolación en el presente. Es una estrategia que, además de manipular intereses, promueve la insolidaridad generacional. Para que mañana puedan poderse pagar las pensiones de jubilación, hay que rebajar hoy sus importes. Para que el sistema de salud público pueda mantenerse en el futuro, hay que privatizarlo hoy.

Lo cierto es que las pensiones sufrirán en 2017 la mayor pérdida de poder adquisitivo en cinco años, tras una subida 0,25% y la previsión de que el IPC estará por encima del 1,5%. La Autoridad Fiscal prevé que la Seguridad Social continuará con déficit durante los próximos años y las pensiones perderán hasta 7 puntos de poder adquisitivo hasta el año 2020.

Estrategia de minusvaloración; para engañarnos como a niños. Cuanto más infantil sea el trato, más probabilidad de que la reacción carezca de sentido crítico.

Los periodistas de TVE critican que la dirección de Informativos impone que se apueste por las noticias banales e inocuas políticamente, mientras se ocultan las incómodas para el Gobierno. O sea: censura. En uno de los últimos telediarios, un programa que dura una hora, dedicaron tan solo 20” al Informe anual de Amnistía Internacional, callando lo que se decía de España, mientras se dedicaba ese mismo tiempo a la noticia del traslado de una osa panda a Estados Unidos y tres veces más (1,15”), para informar del hallazgo de fósiles de dinosaurios en la serranía de Cuenca. TVE ignoraba uno de los momentos políticos más llamativos y comentados del día: el enfrentamiento en el Congreso, durante la Sesión de control, que protagonizaron Pablo Iglesias y Mariano Rajoy, que fue titular en las demás televisiones y medios de comunicación.

Estrategia de la ignorancia; para evitar el control democrático. Presentando los temas como algo complicado y complejo, se aleja la materia del entendimiento medio, dejando la gestión en manos de los técnicos y expertos. Se diseña un sistema educativo de calidad para la clase pudiente; y la educación mediocre para la trabajadora, limitando los recursos.

«Si piensan que la educación es cara, prueben con la ignorancia». Agustín Moreno defendía en la subcomisión del Pacto Educativo en el Congreso, que debe blindarse la financiación para el sistema educativo y no solo por razones de igualdad de oportunidades y de justicia social, si no porque es lo más rentable que puede hacer una sociedad. Un sistema de educación democrático, consecuencia de un acuerdo social, político y territorial alcanzado a través de un proceso de máxima participación de la comunidad educativa, que está pidiendo la derogación de la LOMCE, para establecer una ley que favorezca la estabilidad del Sistema.

Estrategia de la culpa; para que el individuo se autoinculpe de su propia desgracia. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema, el individuo, culpándose, se autoexcluye de la solución y la acción queda inhibida; y ya se sabe que sin acción, no hay revolución. Se acusa a los trabajadores de que no trabajan lo suficiente, a los enfermos que acuden demasiado a los servicios de salud, a las familias que se han endeudado por encima de sus posibilidades y a los jubilados, que son culpables de la precariedad, por no morirse a tiempo.

Hay que alzar la voz contra la inoperancia y porque nos derrumban la Sanidad Pública. Mientras los techos se caen sobre enfermos y trabajadores, se entregan millones a empresas privadas que usurpan el espacio público y facilitan el derrumbamiento de los derechos de usuarios y trabajadores. La Marea Blanca denunció que «Más de 5.500 millones de euros son razones suficientes» para levantarse «Queremos alertar a la ciudadanía del peligro que nos acecha con los presupuestos para 2017», temiendo que traigan grandes recortes, como han prometido a la Unión Europea.

Hay más estrategias de manipulación. Está la Estrategia de provocación; para ofrecer soluciones a problemas creados, provocando la reacción social, a fin de que se demanden medidas, para aplicar a continuación, precisamente, las que el poder tenía previsto aplicar. Se provocan actos violentos en una manifestación, y a continuación la policía actúa contundentemente. Manipula que algo queda.

Estrategia de la mediocridad; para enaltecer lo vulgar. Estimulando la creencia de que lo moderno es ser vulgar, lo inculto cobra protagonismo y el «yo paso» adquiere seña de identidad. Esto se observa, cuando los medios informativos, al servicio del poder, cargan contra los valores de la sociedad progresista y avanzada o contra el sistema público educativo, acusándole de impulsor de valores alejados de la tradición, sin presentar una alternativa de calidad a la sociedad actual.
 
Estrategia de la emoción; para evitar la reflexión crítica. Con esta fórmula, se accede al inconsciente para implantar ideas, deseos, miedos y temores o para inducir comportamientos. Por último, la Estrategia de la sobreprotección; para mostrar quien es el que cuida y protege. Nosotros sabemos lo que España necesita, se escucha decir desde las tribunas. Danos tu voto. Nosotros, que tenemos una visión global, proponemos lo mejor. Tu no actúes, nosotros, nosotros que sabemos. Y con la estrategia del miedo y la criminalización de las protestas, se evita la reivindicación de las demandas ciudadanas.

Nada tenemos que perder «salvo las cadenas». Nunca regalan nada, todo hay que conquistarlo luchando. Contra la manipulación, la mayoría social debe salir a la calle y mostrar la indignación por el trato que nos dan y denunciar la injusticia con el grito colectivo de «Pan, trabajo, Techo y Dignidad», Todos junt@s, con los colectivos sociales, sindicales y políticos por el presente y el futuro.

martes, 28 de marzo de 2017

Los cuadros de una exposición

Cuatro elementos

Verbas

Mi amigo y sin embargo artista (¿o se dice al revés?) Javier Meléndez, "Urza", expone desde el viernes en Compostela, en la misma plaza de la Quintana, una serie de cuadros inspirados en palabras escogidas de los 600Versos de Marta Leira Novo. Hasta mayo tenéis tiempo de verla. Creo que merece la pena.

No es la primera vez que cuelgo en este blog una referencia a Urza. El año pasado una exposición suya me servía para reflexionar sobre el hueco cálido que se intuye en algún rincón del cuadro, en el que nos gustaría penetrar.

Tuve la suerte de asistir a la inauguración de esta nueva muestra, durante la cual, mientras la autora de los versos recitaba sus poemas (muy bien, por cierto), el pintor iba colgando los cuadros que los inspiraron. Acompañó la performance el pianista cubano Alejandro Vargas.

No voy a hacer la crónica del acto, pero quiero prolongar una reflexión, cuando hablaba con el artista amigo sobre la autocontención, la necesidad de embridar la exuberancia, contener la profusión.

Indagábamos sobre lo que otorga coherencia a una obra de arte. Desde luego, el primer requisito es la mente atenta y abierta del espectador, al que corresponde dar sentido a lo que ve, porque la obra solamente vive en el acto de percibirla. Pero ¿cómo organizamos lo que vemos? ¿cuáles son los hilos que el autor nos deja y entre cuyos nudos podemos movernos, libremente, pero con la necesaria seguridad?

El primer requisito es estructura y organización. Tal vez alguien vea en mi afirmación la mente cuadriculada del arquitecto, pero creo que puedo explicarlo.

Un exceso de elementos desorganizados solo engendra caos. Claro que puede ser un divertimento buscar imágenes en las nubes o en las manchas de humedad de una pared, pero la obra de arte no puede limitarse a lo que ya sabe hacer la naturaleza. Entonces es cuando el autor debe organizar aquellos elementos con que compone su obra, aunque siempre dejará, si no quiere caer en la obviedad, un amplio margen para la imaginación del que la contempla.

Se plantea entonces cuántos elementos diferenciados es capaz de organizar la mente. Para poner un ejemplo sencillo: ¿cuántos objetos debe tener un conjunto para captarlo de una vez? Dicho de otro modo ¿qué números podemos percibir sin descomponerlos mentalmente en suma de otros más simples?

Nadie tiene una imagen mental del número trece. A partir del tres, cuatro es dos más dos, cinco es dos más tres, doce es tres veces cuatro...

Contemplando los cuadros, percibí de pronto que constaban de cuatro elementos.

Los cuatro elementos, convenientemente separados por el creador, como hizo el del mundo para hacer surgir el orden del caos, según todas las mitologías, estaban allí presentes, y eran los elementos que desde los filósofos presocráticos se consideró que configuraban toda la realidad física.

Sobre las aguas, el blanco del fondo, nuestro particular demiurgo había hecho emerger la oscura tierra, y en algunos lugares se podía ver el paso de uno a otro elemento.

El aire aparece en aquellos espacios vacíos, recuerdos del hueco amable de la anterior exposición. Nada ha dejado el artista, sino aire, en esos perímetros sutilmente calibrados.

¿Donde está entonces el fuego? La energía que mantiene atados los otros elementos está representada por esas cuerdas que tensan el cuadro y dan al espectador las líneas de fuerza que lo dirigen, sin forzarlo, para integrar la composición.

Tal vez urza no fue consciente de este análisis posible, pero para mí que esa es la función que, seguramente por el instinto creador y la experiencia de su oficio de escultor, obligado a manejar y estructurar volúmenes reales, otorgó, aún sin pensarlo, a los cuatro elementos que ordenan estos potentes cuadros.

Tierra y agua del ceramista
Aire del escultor
Y el fuego...

Juan José Guirado
Marzo de 2017

sábado, 25 de marzo de 2017

Perspectiva unificada XIV

Al Método de perspectiva unificada le faltaba todavía algún complemento en este blog.

En este dibujo de Escher las figuras de dos manos se ayudan mutuamente a escapar del papel. No deja de ser una metáfora de la visión en relieve, en la que no dos manos, sino dos ojos, hacen salir del plano a sus imágenes.


En las figuras que siguen, para obtener la sensación de relieve buscada, hay que mirar cada imagen del par con el ojo correspondiente. Seguramente costará a quien no lo haya hecho nunca, pero varias técnicas pueden ayudar a lograrlo.

En primer lugar, la distancia entre las imágenes no ha de superar la que separa los ojos del espectador, para hacer posible la convergencia. Cumplida esta condición, Acercaremos el rostro al dibujo hasta que cada ojo encuentre la suya. Alejándonos depacio, llegaremos a ver una imagen central en relieve, flanqueada por dos planas.

Facilitaremos la tarea si interponemos entre ambos ojos, perpendiculara la plano, una hoja de papel, impidiendo que cada ojo vea la imagen destinada al otro.

Probad con esa figura de un paralelepípedo transparente, con una flecha en diagonal. Cuando logréis fundir los puntos origen de las flechas en uno solo, veréis el volumen. 


Aquí dos cubos, uno transparente (o "de alambre") y otro opaco:


Y aquí dos tetraedros. Fundid los pequeños puntos interiores. Al lograr la visión en relieve os daréis cuenta de que uno de ellos es transparente, o bien le falta la cara delantera:


Un cubo truncado transparente y otro opaco:


Octaedros, y más abajo las maclas de dos tetraedros cuyas aristas se cortan entre sí:


Octaedros truncados:


Cuboctaedros. No olvidéis fundir esos puntos que apenas se ven:


Dodecaedros transparentes inscritos en un cubo:


Los mismos, opacos:

 
Bellas figuras de dos icosidodecaedros transparentes inscritos en un mismo cubo:


Los mismos, opacos:


Dos icosaedros transparentes:


Icosaedros opacos. Seis aristas de cada uno pertenecen a las caras del cubo que los contiene:


Por último, estas figuras de dodecaedros en las que se han sustituido las caras por estrellas pentagonales. Podéis contemplar su interior:


Todavía falta un último suplemento...


Análisis de Michel Husson

Recojo más abajo un breve texto que publica Jorge Riechmann en su blog  tratar de comprender, tratar de ayudar.

La reducción del tiempo de trabajo que propone este economista parece la única solución al desempleo creciente y masivo que produce la "escalada de la productividad".

¿Seremos incapaces de acercarnos al pleno empleo, combinando esta medida con la creación de nuevos empleos públicos en sectores de interés social cada vez más desatendidos? (y crecientemente privatizados, y en los que de esta manera la "eficiencia empresarial" lanza cada vez a más personas al paro).


Análisis del economista Michel Husson, de paso por Madrid

Michel Husson, economista, intervino el 22 de marzo de 2017 (con motivo del 25 aniversario de Viento Sur y de su número 150) en un acto celebrado en la Plaza de los Comunes en Madrid. Miguel Martín tuvo la gentileza de comunicar esta sinopsis personal (la grabación del acto será colgada en algún momento en la web de Viento Sur).

“Recordad que el fundamento (e incentivo) del crecimiento del capitalismo es la elevación de la productividad. Pero desde hace cuarenta años la productividad viene tendencialmente bajando.

Lo lógico en estas circunstancias es que los beneficios empresariales bajen. Pero desde la [contra]revolución neoliberal los beneficios han subido. La financiarización (precarización) es uno de los mecanismos para chupar de la parte de los salarios hacia la parte de los beneficios. Sin inversión productiva, porque la rentabilidad del capital es baja.

Por otro lado los bancos centrales han fabricado mucho dinero que ha ido a la especulación (muy poca inversión, nula inflación). Dinero ficticio. La financiarización que ha sido una “solución” (para la burguesía) a la crisis keynesiana de los ochenta se ha transformado ahora en un problema. La actual crisis busca la “solución” a la “solución”.

Ahora hay pues “demasiado capital” y poca demanda desde el punto de vista de los capitalistas. Aquí es donde aparecen sus escenarios políticos de futuro: ¿destruir capital?, ¿quién pierde?; ¿estimular una (¿espúrea?) demanda con mecanismos como la renta básica universal?; ¿no hacer nada y caer en una distopía a lo novela británica?

Michel propone la contra-línea de acción basada en la reducción del tiempo de trabajo como prioridad frente a esquemas de rentas garantizadas que irían en sustitución del salario social mutualizado. Discusión.”

domingo, 12 de marzo de 2017

A salto de mata

Muy real y menos caricatura de lo que parece es lo que cuenta el mensaje de WhatsApp que coloco al final de esta reflexión. Imposible saber de donde viene, como ocurre con tantos y tantos que se reciben y reenvían cada día.

Por su parecido con situaciones vividas lo traigo aquí. No creo que la única razón sea la kriptonita, aunque también influye lo suyo. Hay un hecho objetivo que debemos considerar.

Esta falta de eficacia en la actividad libre (la dictada puede gestionarse de otros modos) tiene que ver con la paradoja de Jevons, que puede expresarse así:
"A medida que el perfeccionamiento tecnológico aumenta la eficiencia con la que se usa un recurso, es más probable un aumento del consumo de dicho recurso que una disminución".
Podemos concluir que la tecnología, destinada a facilitarnos la vida, nos la ha complicado, porque al aumentar nuestras expectativas nos hace concebir falsas esperanzas de llegar rápidamente a todas partes, que se verán defraudadas al querer hacer todo lo posible: en potencia, pero no en acto. Entonces es fácil enredarse en actividades que chocan las unas con las otras, y si no somos capaces de contenernos y sacrificar la mayoría de ellas caeremos en una impotente frustración.

El ejemplo que se suele poner, y es el que motivó las investigaciones de Jevons, es el de la energía, un recurso limitado para el que la introducción de tecnologías cada vez más eficientes, al aumentar su consumo total, más que abundancia ha generado escasez y agotamiento.

Un recurso más limitado aún es el tiempo. Cada vez se pueden hacer más cosas en menos tiempo, y cada vez tenemos menos tiempo para meter en él muchas más cosas. Lo urgente (¿y qué será lo más urgente?) no nos deja acabar lo importante. El atasco, si no somos capaces de autolimitarnos, es inevitable, y con él el desorden creciente. También es así en nuestra vida cotidiana.

Son muchos los amigos jubilados que se quejan de que ahora tienen menos tiempo para hacer lo que quisieran que cuando trabajaban. Entonces contaban con el futuro. En él depositaban demasiadas posibilidades. Ahora disponen de más tiempo para muchas cosas, pero su horizonte temporal se reduce. Se aprieta el acelerador cuando el coche no carbura bien, y el motor se ahoga.

Cuando era niño, en mi pueblo no había agua corriente, había que llevarla desde la fuente en cántaros. Me llamaba la atención el brusco final del llenado, cuando el agua se oía caer con un sonido cada vez más agudo y luego, súbitamente, desbordaba.

Es la propia ansiedad la que aturulla y no te deja hacer una a derechas. Demasiadas clavijas para una sola base de enchufe.

PARA MAYORES  Y PARA LOS QUE AÚN CREEN QUE NO LO SON.
ESTE NO ES BUENO... ES BUENÍSIMO

Me han diagnosticado que padezco SADAE:
Síndrome de Atención Deficiente Activado por la Edad.
 
Se manifiesta así:

Decido lavar el coche.

Al ir hacia el garaje, veo que hay correo en la mesita de la entrada.

Decido echar un vistazo a las cartas antes de lavar el coche.

Dejo las llaves del coche en la mesita, voy a tirar los sobres vacíos y los anuncios en el cubo de la basura y me doy cuenta de que está lleno.

Decido dejar las cartas, entre las que hay una factura, en la mesita, y llevar el cubo a vaciar en el contenedor.

Entonces pienso que, ya que voy al contenedor, puedo pagar la factura con un cheque y echarlo en el buzón que está al lado del contenedor.

Saco del bolsillo el talonario de cheques y veo que sólo queda uno.

Voy al despacho a buscar otro talonario y encuentro sobre la mesa la Coca Cola que me iba a beber  y se me había quedado olvidada.

Retiro la lata para que no se vierta sobre los papeles y noto que se está calentando, por lo que decido llevarla a la nevera.

Al ir hacia la cocina me fijo en que el jarrón de flores de la cómoda de la entrada está sin agua.

Dejo la Coca Cola sobre la cómoda y descubro las gafas de cerca que he estado buscando toda la mañana.

Decido llevarlas a mi escritorio en el despacho y después, poner agua a las flores.

Llevo las gafas al despacho, lleno una jarra de agua en la cocina y de repente, veo el mando del televisor.

Alguien se lo ha dejado en la mesa de la cocina.

Me acuerdo que anoche lo estuvimos buscando como locos.

Decido llevarlo al salón, donde debe estar, en cuanto ponga el agua a las flores.

Echo un poquito de agua a las flores y la mayor parte se derrama por el suelo.

Por lo tanto vuelvo a la cocina, dejo el mando sobre la mesa y cojo unos trapos para secar el agua.

Voy hacia el hall tratando de recordar qué es lo que quería hacer con estos trapos.


Al final de la tarde:

el coche sigue sin lavar,

no he pagado la factura,

el cubo de la basura está lleno,

hay una lata de Coca Cola caliente en la cómoda,

las flores siguen sin agua,

sigue habiendo un solo cheque en mi talonario,

no consigo encontrar el mando de la tele

ni mis gafas de cerca,

hay una fea mancha en el parquet de la entrada

y no tengo ni idea de dónde están las llaves del coche.

Me quedo pensando cómo puede ser que sin haber hecho nada en toda la tarde haya estado todo el rato danzando y me encuentre tan cansado.

Hazme un favor: envía este mensaje a todos los que conozcas, porque no me acuerdo bien de a quién se lo he enviado y no te rías, porque si aún no te ha llegado, ya caerás.

P.D: Perdón por la letra tan grande, pero aún no he encontrado las gafas.```