martes, 17 de noviembre de 2020

Día Internacional del Flamenco

Ayer fue el Día Internacional del Flamenco. El 16 de noviembre de 2011, la UNESCO reconoció a la cultura andaluza como Patrimonio de la Humanidad. Significativamente, también coinciden en esta fecha el Día Internacional para la Tolerancia  y el mismísimo Día Internacional del Patrimonio Mundial.

Con tal motivo quiero dejar aquí algunas muestras de este arte, a un tiempo singular y plural.

Alegría y tristeza, dulzura, dolor o amargura, están presentes de forma muy diversa en sus muchos estilos. Lo que nunca falta es el sentimiento. En el folklore de todos los países y de todos los tiempos se expresa lo humano de muchas formas, pero aquí es difícil de encontrar lo bufo.

De los palos del flamenco elijo hoy los tientos. Si en la seguiriya hay un grito desesperado, aquí el sentir es mucho más contenido. 

Las letras de estos cantes, en particular las más tradicionales, están llenas de lirismo:

¿Qué pájaro será aquel
que canta en la verde oliva?
Corre y dile que se calle
que su canto me lastima.

De pasión, muchas veces posesiva y destructiva:

Te viá mete en un convento
que tenga rejas de bronce,
pa que tú pases fatigas
y de mi cuerpo no goces.

De evocación y desengaño:

La casita donde yo habitaba
como era de polvito y arena
el vientecito se la llevaba.

Juan Martín, El Cabogatero, fue un cantaor almeriense del siglo XIX. Aquí evoca su cante Rafael Romero, El Gallina:

Un cantaor algo olvidado, Roque Montoya, Jarrito, por tientos:

Y otros del mismo cantaor:


1 comentario:

  1. « Quien escucha de verdad flamenco espera encontrarse en esa "situación límite" con algo que, sin corresponderse con su propia vida, lo lastime y excite por dentro. La verdad expresada por el intérprete es la verdad intuida por los más predispuestos testigos. No se trata de una "fiesta" en el más usual sentido del término, sino de la biológica sublimación de una angustiosa intimidad, aun cuando se utilice el vehículo de los llamados cantes y bailes "festeros". »

    Caballero Bonald

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