Los Versos de Acero fueron escritos en 1915. La Gran Guerra había comenzado el año anterior. Lo peor aún no había llegado.
En las guerras la religión juega un papel importante. Realiza un apoyo psicológico que siempre ha sido aprovechado por la organización militar. Si Dios está con nosotros, la victoria es segura, y si muero en su nombre obtendré la salvación eterna. Es humano aferrarse a la vida, aunque sea a la promesa de otra vida. Aunque fuera por casualidad, observo ahora que fue en la víspera de los difuntos cuando en un post sacado del mismo libro recordaba la voz del Pontífice llamando a la paz.
La institución religiosa está muy presente en los ejércitos, contradiciendo este espíritu de concordia. La Iglesia (casi todas las iglesias) están incrustadas en el estamento militar.
En los versos que siguen (octavas reales, el metro bélico por excelencia) su autor utiliza los colores sin connotación política, de un modo ajeno al habitual. Actualmente, en nuestro país, el rojo se asocia a la izquierda y el azul a la derecha. En los Estados Unidos la cosa no está tan clara.
Procesión en la base de la OTAN de Incirlik (Turquía) con soldados y oficiales españoles |
«Soldados: La Razón y la Justicia,
nos llaman a esta lucha gigantesca;
LOS AZULES
«Contra todas las reglas del Derecho,
LOS NEUTROS
Si tuviese a bien Dios, prestar oído
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