"Utópico" y "maestro" eran dos adjetivos que usaron en otro tiempo para desacreditar a Julio Anguita. Hace bastantes años, cuando era coordinador de Izquierda Unida (¡él, no yo!), doce periodistas afilaron sus plumas (bueno, sus lenguas) en un programa de Antena Tres.
Viendo de nuevo aquella rueda de preguntas y los exordios que las acompañaron, no me he fijado tanto en las respuestas de mi utópico maestro como en la seguridad, a veces campanuda, con que los entrevistadores afirmaban cosas que ahora se tambalean. El pensamiento neoliberal cabalgaba triunfante sobre las ruinas del socialismo real.
La entrevista que dejo a continuación es mucho más reciente. Es, además, un repaso histórico que abarca toda una época perdida en el olvido y los tópicos. Destila conocimiento y experiencia. Magisterio, sobre todo, pedagogía de la buena.
Yo, que también he sido un poco maestro, como la pedagogía es inseparable de la didáctica, os dejo una recomendación. Para destilar hasta la última gota de la sabiduría que contiene, oídla con detenimiento, dadle más de una vuelta. Parad el vídeo y reflexionad sobre lo que enseña a cada momento.
Mi agradecimiento a Manolo Peña-Rey por hacerme llegar la entrevista.
No es un bello producto, no es un fruto perfecto... pero alguna vez esto tenía que empezar. Todo corre prisa, el tiempo se encoge como la piel de zapa. Por eso lo importante se hace urgente y lo urgente cobra importancia. Ahí va eso. Irá cambiando, se desarrollará, pero no se puede esperar más. Época rara ésta. ¿Lo habrán sido todas? Posiblemente, pero no en tan alto grado. Ahora todo es apariencia. Intentemos descubrir juntos qué hay detrás del decorado.
Había disfrutado de esta entrevista con anterioridad y hoy he vuelto a disfrutar de ella.
ResponderEliminarArticulo bellamente escrito y maravilloso video;es un espectaculo para el verdadero saber, ver, oir y leer al gran Julio Anguita.
ResponderEliminarApertas agarimosas, amigo Guirado.
intentandolo-2.blogspot.com